Tenía muchas ganas de participar en esta carrera, pero por
una cosa u otra no había podido ser hasta este año, la Transgrancanaria es de
esas carreras que quieres tener en el calendario y por fin se ha cumplido.
Salimos el viernes por la mañana a primerísima hora ( 3AM ) rumbo
a Barcelona a coger el avión, justo llegar a Las Palmas, taxi y al hotel para
dejar las maletas e ir a buscar los dorsales, íbamos con el tiempo justo!
Nos encontramos a un montón de amigos por la zona, incluso nos
fuimos a comer un poco de pasta con ellos para coger fuerzas, ya que esa misma
noche competíamos. A las 15:00h siesta de 4 horas y otra vez a cenar pasta, las
baterías cargadas a tope!!
Preparación previa a la carrera, la verdad es que sientes
los nervios, toda mi familia y amigos ayudándote y recordando todo sobre el
material… y sobre las 22:00h rumbo a la salida de la Transgrancanaria, en la
localidad de Agaete. Allí nos encontramos a más conocidos, un par de cafés y muchísimos
nervios, tenía tantas ganas de que empezara la carrera que estaba por las
nubes. Lo mejor fue el ambiente que había, y lo animada que estaba la gente.
A las 00:00h empezó el gran reto, pronto empecé a saborear
el sufrimiento y ese “algo” que buscamos la gente que hacemos este deporte. Tenía
muy claro que quería ir de menos a más y se lo hice ver a mis compañeros de
fatiga (Josep Maria, Albert y Gerard) y así lo hicimos, muy tranquilos al
principio, pero sin perder ni un segundo. La ascensión era bestial (de 0mts a
1300mts en 10Kms), eso sí, era increíble ver todo a oscuras y una línea de
frontales ascendiendo en línea recta que no acababa. En esos momentos, charlábamos,
nos reíamos y demás, pero siempre concentrados en hidratarse y alimentarse, hacia
bochorno y se sudaba mucho, hasta que llegó la lluvia.
Mucho frío, viento y todo negro, eso es lo que sentí durante
7 interminables horas. No veía nada de paisaje, ya que era de noche, la lluvia me
caló enterito y encima hacía un viento racheado insufrible. Además, mis
compañeros desde el primer momento no paraban de apretar, llevaban un ritmo más
fuerte que el mío y no quería quedarme atrás, así que lo di todo. En el Km 30,
en Bentayga, empezó la claridad, pero
llovía incluso más que por la noche, pero al ver algo de paisaje me motivé un
poco, ya era otra cosa. Correr de noche no tiene sentido, a mi me gusta correr
disfrutando del paisaje, es un aliciente, de noche me siento tonto avanzando sin
sentido (lo tenía que decir).
Seguía sin sentirme cómodo. La transgrancanaria es una
carrera de montaña 100% y yo no había hecho ni un entreno semejante a ese
terreno y desnivel, así que me tocaba tirar de cabeza, como siempre. Eso sí que
lo tengo entrenado. Fui sufriendo mucho, pero muy concentrado en la
alimentación, sabía que si me controlaba bien, las fuerzas las tendría y de
coraje ya tiraría yo.
Íbamos todos muy concentrados, no hablábamos mucho. La
verdad es que al ser cuatro corriendo, las pájaras se compartían y si no la
tenía uno, la tenía otro, teníamos claro que al Km 80, queríamos llegar un poco
en forma, pero es que antes había una pedazo de subida de casi 20kms y casi
1500mts de desnivel positivo, me destrozó el final de esa subida. Fue algo muy
duro con lluvia durante toda la ascensión y muchísimo viento en la cima, allí
vi realmente el sufrimiento al que llevamos el cuerpo en estas carreras.
Llegamos a Garañon Km79 ( 13hrs27min ), por fin!! y
avituallamiento de lujo: macarrones con tomate, caldo calentito y 10min de
descanso. El equipo tenía que recuperar fuerzas. Nos sentó tan bien… y encima
en ese preciso instante, dejó de llover!! La moral estaba por las nubes. Salió
incluso el sol y el paisaje era de película, 100% motivación, sabíamos que acabaríamos
si o si. Yo tenía los cuádriceps bastante tocados y el camino era todo bajada,
así que imagínate, pero como siempre, a apretar dientes y seguir hacia adelante.
El descenso a Teror Km95 se nos hizo muy largo a todos, incluso a Albert que era
nuestro guía particular y el que nos hacia tirar más de la cuenta. Por cierto,
gracias a él llegamos en ese tiempo, ya que si hubiera ido solo, un par de
horitas más tardo fijo.
En Teror mis padres y mi hermana me llamaron que habían
acabado su carrera de 24kms, estaban muy contentos, y Albert Vives, un amigo
que estaba haciendo la carrera de 42Kms me llamó y me dijo que me esperaría en
Tenoya para acabar juntos, vaya final de carrera, todo iba a salir perfecto.
Nosotros a lo nuestro, seguir avanzando y restando kms, ya
era todo bajada y con el mar de fondo, se empezaba a ver Las Palmas. Pero a
falta de 15kms, el peor tramo de toda la carrera, ya sea porque estábamos cansados
o por los 5kms de río seco lleno de piedras sueltas que no dejaba ni correr.
Josep Maria se puso las pilas y nos arrastró a un ritmo bestial por ese pedregal
y nos avanzó restando treinta minutos de lo que hubiéramos hecho, qué duro!!
Saliendo del pedregal, llegamos a Tenoya, era el último
avituallamiento y Albert esperando. Momentazo. Le advertí que íbamos rápido,
pero se portó como un campeón hasta la meta. Una subida bastante dura y todo el
resto de bajada, riendo, charlando y saboreando la victoria. Queríamos bajar de
las 20 horas así que encima corriamos muy rápido. Incluso se hizo de noche y ni
pusimos el frontal para no perder tiempo.
Y llegó la hora de la verdad. Nos cogimos las manos y
cruzamos la gran soñada meta de la Transgrancanaria, todo un lujo. No me
hubiera imaginado nunca acabar así una carrera tan compleja y dura, normalmente
cada uno va a su ritmo y es difícil coincidir, pero “la unión hace la fuerza”.
Muy agradecido a Neus, por dejar que siga soñando, a mis
padres y hermanita que se han portado genial, a Albert Vives por proponerse
hacer una maratón, acabarla y llegar conmigo a meta, a todos los compañeros que
me he encontrado en estos dos días ( marc, josep, laura, diego,berta, pablo, Samu etc...) a los canarios Valle y Jose por los ánimos durante toda la carrera y al equipo Trans (Gerard,Josep Maria,Albert),
gracias!!
Por último decir que estas carreras se han de entrenar muy
específico. No por más horas corriendo lo harás mejor. Yo había entrenado
mucho, pero nada técnico. Y así me ha ido. He sufrido mucho pero estoy muy
contento de haberla acabado. Siempre aprendes algo nuevo.